Riesgos de ser apoderado legal

Millones de Productos que Comprar! Envío Gratis en Productos Participantes. Esta es la mejor idea del año! Cambia tu vida ahora. Tipos de apoderado. Las facultades del apoderado de una empresa dependerán en todo caso del tipo de poder notarial que se formalice. Dependiendo de las características del documento, el alcance de sus capacidades podrán ser especiales (para determinados asuntos) o generales. Todos estamos en riesgo de ser estafados, sea con o sin poder legal.

Si su ser querido tiene el control de algunos bienes que no le haya encargado, también puede ser estafado. Si la persona fue estafada antes de otorgarle un poder legal, usted puede encargarse de lo sucedido y minimizar el daño. Ser apoderado legal de una empresa o de una persona no es tan sencillo como parece, más aún si incurre en un hecho irregular.

Tiene consecuencias que, incluso, puede terminar en la detención de quien acepta representar. Un apoderado, en principio, no debe responder por las deudas de la sociedad ya que sus obligaciones son diferentes a las del administrador.

Los apoderados especiales, representas a los jefes del personal que tienen la facultad para representar a la empresa en operaciones específicas. Riesgos de ser un apoderado.

En cuanto a los riesgos de un apoderado, se puede decir que son personas que tienen una gran responsabilidad y compromiso que se encuentra establecida dentro de la. En el caso de las personas naturales, el representante corresponde a un apoderado. En el segundo caso, el representante legal puede ser el gerente de una empresa, el administrador de un conjunto residencial, etc.

Por ejemplo, en el caso de una Pyme, el representante legal puede ser uno o varios socios o, si lo prefieren, puede ser un tercero. Los socios que conozcan de irregularidades cometidas por el representante legal o los administradores de la socieda pueden denunciar estos hechos ya sea ante la Superintendencia de sociedades o ante la autoridad judicial competente, según sea el caso.

Entonces, hay diferencia entre apoderado y representante legal. Un apoderado es una persona nombrada para que pueda actuar en ciertas situaciones y con determinadas facultades que se recogen en una escritura notarial denominada poder. Ok… vámonos un poco mas despacio. Un ejemplo típico puede ser el de cualquier empresa listada en bolsa, ninguno de sus accionistas, ninguno de los por ejemplo 434.

Ecopetrol pueden, con su firma, decidir sobre el destino de un barril, un lápiz o un empleado de la compañía, pues todos, o por lo menos la mayoría, han escogido al representante legal, para que sea quien decida no sólo sobre barriles. Esto con fundamento en la contradicción de tesis de rubro: APODERADO.

Lo que dice es que en esos casos será necesario que esa persona acredite ambas calidades: la de apoderado, a través de testimonio notarial, y la de abogado patrono, a través de cédula profesional. Con esto, se cumplen todos lo requisitos necesarios para que se presente esta persona como representante legal en cualquiera de sus capacidades.

De los preceptos legales transcritos se desprende que la Ley Federal del Trabajo contempla la figura de la representación convencional, al permitir que las partes concurran a juicio a través de apoderados, conforme a reglas específicas de acreditamiento que son muy flexibles tratándose del trabajador, así como la validez de las notificaciones practicadas al apoderado o al autorizado de. También podrán comparecer por conducto de apoderado legal, quien en todos los casos deberá ser abogado, licenciado en derecho o pasante.

Alcances Prácticos La formulación normativa reconoce dos formas de comparecer a juicio: directamente y por conducto de apoderado. De este modo, puede otorgarse un apoderamiento para algún acto concreto y especifico, o conferirse un poder general para gestionar la marcha cotidiana de la empresa, pudiendo incluso conceder al apoderado similares facultades que al administrador, siendo este poder general el que puede comportar mayores riesgos y responsabilidades para el apoderado.

El riesgo legal proviene de la legislación que afecta a los contratos mercantiles o financieros realizados. Es decir, que el ordenamiento jurídico nacional e internacional, en su caso, ofrezca la seguridad necesaria de que los contratos se ajustan a derecho, son válidos y que se pueden hacer cumplir.